En el mundo de las transacciones de automóviles, el agente automotor alemán se está convirtiendo cada vez más en un intermediario esencial.

En particular, permite a los compradores de vehículos simplificar los procedimientos de compra de vehículos.

Si el agente automovilístico Alemania se ha ganado sus sólidas cartas de nobleza en el sector, es entre otras cosas porque gestiona de la A a la Z los expedientes de adquisición o venta de vehículos.

La gestión también incluye todos los procedimientos administrativos pesados inherentes a estos intercambios, desde las negociaciones hasta la entrega y la puesta en servicio del automóvil.